Descripción
Caracol ecológico de granja en bote
El caracol de granja ecológico en bote, es un caracol de carne blanca y suave, con sabor uniforme y delicado. Estas características son muy apreciadas por el consumidor final. Es un caracol único, producido en nuestra granja de forma controlada y con un mimo especial.
De la misma forma que el formato vivo, está sujeto a las certificaciones de producción y envasado ecológico. Certificaciones que garantizan, no solo su procedencia, sino también sinónimo de calidad.
Por lo tanto, lejos de lo que se pudiera pensar, el caracol ecológico que envasamos es de la misma calidad que el que comercializamos vivo. De hecho, es el mismo caracol ecológico que, de forma aleatoria va a la conserva o se destina a la venta en fresco.
Además, los productos ecológicos son saludables para el consumidor y para el planeta. Para el consumidor porque en su producción no se utilizan pesticidas, herbicidas, medicamentos ni alimentos transgénicos. Y para el planeta, por las mismas razones anteriores, además de utilizar métodos de producción más extensivos y sostenibles que los convencionales.
¿Por qué elegir el caracol ecológico en bote?
Para empezar, por su presentación en tarro hermético de 800 ml, con 450 gr de caracol escurrido (40-50 piezas). Esto lo hace muy fácil de guardar, transportar y utilizar.
A su vez, el caracol llega a tu cocina perfectamente limpio y sin piezas para desechar. «Engañado» (con el bicho asomando fuera de la concha) y listo para añadirle tu salsa favorita. Todo esto facilita su preparación.
Por último, dispone de 5 años de fecha de caducidad desde su fabricación. Resulta muy útil poder tener dos o tres botes de caracol en la despensa para disponer de ellos en cualquier momento. Con la garantía de tener «un manjar en la manga» para cuando sea necesario recurrir a él.